¿Quién soy?

Buenas. Hace unos 27 años empecé a coger la bicicleta de carretera con unos amigos. Unos años después, terminamos la I Marcha Pedro Delgado, la Perico, y fuimos 2 veces a los Lagos de Covadonga. Con el tiempo y el trabajo la pude coger menos, hasta que hace 10 años la dejé casi por completo...hasta que hace 2 años hice la puesta a punto a mi vieja bici, compré una baratita de montaña, y me fui poco a poco reenganchando a este mundo del que no debería haber salido nunca. Mi objetivo es volver a terminar la Perico el año que viene, y para ello estoy saliendo con la Peña Cedena de Fuenlabrada, Madrid. Nos vemos en las carreteras y caminos.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

LA PERICO / NAVAFRÍA CIMA MA06 (164 KMS) 15/8/2015

Esta vez nos encontramos ante una concurrida y dura marcha, porque si miramos el perfil veremos que apenas hay algún segmento completamente llano en el recorrido. Concurrida, como he dicho, también fue, porque de hecho los organizadores, ante la avalancha de inscripciones que iban llegando, primero cerraron el plazo, y luego, como había mucha gente en la reserva, lo abrieron hasta aceptar 2.200 participantes; aún quedó gente en la reserva, pero ya era una cantidad más que notable.

En el plano estrictamente personal, y para quien no haya leído la presentación del blog, tenía muchísimas ganas de hacerla, pues después de volver al ciclismo y quedarme con las ganas de intentarlo el año pasado (no llegaba bien de forma, no merecía la pena venir a sufrir sólo por acabar), este año quería acabarla disfrutando más o menos deprisa, sin sufrimientos extremos ni nada parecido.

Decir que no se quiere venir aquí, a una marcha con 164 kms y 3 puertos de 1ª y 1 de 2ª categoría que suponen un desnivel de 3.100 mts, a sufrir puede parecer una frivolidad casi, pero es que entre enfrentarte a este tremendo "coco" entrenado y en forma o desentrenado y fuera de punto hay un mundo. La Quebrantahuesos, por poner un ejemplo conocido, es casi 40 kms más larga pero tiene un desnivel parecido, lo que nos puede hacer pensar que el desnivel/km es superior en ésta que en aquella. Lo que al menos no nos iba a hacer sufrir era el calor, las previsiones hablaban de un tiempo no demasiado caluroso al principio, aconsejando llevar manguitos al inicio, cosa que cumplí a rajatabla. Me los acabaría quitando más adelante, pero esa es otra historia...

Había reservado una habitación en Segovia, cerca del acueducto, para dormir y no tener que, como hice hace 21 años, levantarme sobre las 5 de la mañana a cargar la bici y salir a por el dorsal y demás. Esa noche quedamos a cenar con Clara e Íñigo (del estupendo blog Una bloguera muy globera) y cargarnos bien de hidratos y pasta, con una animada y divertida conversación. Por la mañana, un gran desayuno buffet del hotel me cargó bien las pilas y tan contento me dirigí a la salida, donde nuevamente coincidí con ellos. También habíamos quedado con David (del blog Dukemtb, también totalmente aconsejable) y, por mi parte, yo también había quedado con un par de amigos del CC Cabanillas, pero debido al número de gente, no conseguí verles más que al final de la ruta.

La salida, bajo el acueducto, es un sitio espectacular, y además, había un gran ambiente de ciclismo. La marcha, que siempre homenajea a alguien, decidió, en su XXII edición, hacerlo con Pedro Delgado y su equipo al coincidir con su trigésimo aniversario de su primera victoria en la Vuelta.

Disfrutando desde el inicio
Una perspectiva más amplia de la salida

A las 8 y algún minuto se da la salida, ésto era lo que nos esperaba por si alguien aún no lo conoce:



Antes de continuar, debo decir que Strava no es muy preciso en los móviles, sobre todo cuando hay muchos puertos o muchos repechos; en los primeros, suma metros de desnivel de más, y en los segundos, de menos (comprobado en ambos casos). De cualquier forma, es un programa como cualquier otro para controlar el entrenamiento (y muy adictivo, por cierto, jejeje), y es el que yo uso; por eso siempre pongo su recorrido.

La salida del pueblo, hasta llegar casi al desvío a La Granja (poco antes de salir de Segovia), se hace en subida y empedrado, por lo que las caras de la gente pueden ser casi como la mía, jejeje:

Arranca-para, cuidado, cortesía de Ciclismo a Fondo
Desde que se sale de Segovia hasta La Granja es un tramo neutralizado, pero la gente ya empieza a pisar el acelerador, sobre todo, los que buscan tiempos; no era mi caso, y aprovecho para calentar muy suavecito y sin ninguna prisa, por lo que me adelanta un montón de gente. Al llegar allí y pasar bajo un arco que lee el chip que llevamos tras el dorsal de nuestras bicicletas, empieza el tiempo cronometrado.

Por aquí he subido menos de 5 veces en mi vida (en la I y otras ediciones, se hizo la marcha en sentido contrario; en mi opinión, más dura), la más próxima no hará menos de 15 años, así que no me pienso cebar ni un poco. Vamos pasando las Áreas Recreativas tras La Pradera y Valsaín y aparecemos en el puente sobre el río Eresma (donde algunos compañeros de equipo de Perico cuando ganó la Vuelta en el 83 están parados animando a los ciclistas; yo reconocí a Vilamajó, Manuel Jorge Domínguez y Peio Ruiz Cabestany). Allí empieza la parte seria, como ponen en su altimetría los compañeros de altimetrias.net:

Puerto de Navacerrada

Cuando empiezan las "revueltas" y herraduras, me encuentro muy bien y subo adelantando a mucha gente a tren, poco a poco y sin pegar un solo demarraje. Subo a mi ritmo, que es lo que hay que hacer en estas marchas y estos puertos tan largos, y no veo ninguna rueda que me interese seguir, bien por rápida o bien por lenta. Me encuentro muy bien (eso sí, es el principio) y subo en poco menos de 38 minutos desde el puente hasta arriba (6,8 km a casi un 7,6% de media), y cuando llego, me detengo a hacer una foto del primer coloso del día:

El primero, en el saco

Hay que recordar que, aunque Navacerrada está en una carretera nacional y lo sube mucha gente cada día y cada mes, es un puerto bastante duro, en mi opinión casi subestimado. Está claro que no es el más duro de España, pero también que no se sube silbando, jejeje.

Parar fue un error, pues no había avituallamiento y desde aquí el tráfico ya era abierto. Cuando fui a tirar hacia Cotos, me quedé bloqueado por un grupo de coches hasta que llegamos a Cotos y les pude dejar atrás, pero me retrasaron bastante. De cualquier forma, no había prisa, si no mucha tranquilidad. Al llegar a El Paular, algunos de los adelantados que también habían parado, me fueron alcanzando y formamos un grupo de gente estable que se quedaba de mí en las subidas y me cogía bajando...

Llegamos a Rascafría y su maldito "casi-pavé" y giramos a la derecha hacia Miraflores pasando por el puerto de La Morcuera, altimetría que pongo aquí:

Puerto de La Morcuera

Este puerto es bastante tramposo, según se sale del pueblo hay una larga bajada de casi 2 kms y luego empieza la subida poco a poco hasta llega a la parte dura, una zona de herraduras y duras rampas que sólo suaviza cuando nos acercamos al Barranco de la Angostura (por cierto, una zona espectacular; lástima que no fuera yo precisamente como para echar fotos, jejeje).

Terminando las herraduras

Tras el quitamiedos, el barranco

Hay que recordar que son 13 kms, la parte final es muy rectilínea y aunque tiene pendientes muy suaves, se hace muy larga; menos mal que éste sí lo pude repasar no hará ni un mes. Igual me sirvió para mejorar mi tiempo, casi 53 minutos y medio desde el puente donde empieza lo más duro, y otros 10 minutos más desde que salimos de Rascafría. Antes de llegar a la cima, hay un avituallamiento al lado de la fuente Cossío y un punto de control para los chip muy bien señalizados. Repongo agua, isotónica, una barrita que nos habían dado, y hacia la cima a hacer la foto:


El cartel estaba muy bajito, jejeje. Ya van dos...

Me tiro cuesta abajo hacia Miraflores siendo muy consciente de la tremenda velocidad que se coge aquí y del giro hacia Canencia y su rampón de recibimiento. Poco antes de llegar al mencionado giro, hay unos voluntarios avisando a los ciclistas que quitemos plato grande, que empieza la subida de golpe. Les digo que ya, cambio, y en pleno rampón (el primer kilómetro es el más duro con diferencia) adelanto a bastantes ciclistas de fuera que no se sabían "el truco" y se quedan clavados, aprovechando entonces para bajarme los manguitos pues ya hacía calorcito. Esta es la altimetría de este puerto de Canencia (este es de segunda, los otros tres son de primera):

Puerto Canencia

Como se ve en el perfil, hay 3 partes muy diferentes: el primer kilómetro y el segundo (donde empieza a bajar la pendiente), otros 3 kilómetros casi llanos, y los 3 últimos, muy constantes a 7% (incluso un poco más en el último). Tras el rampón, mis "compañeros" me cogen y vamos de charleta hasta que, a falta de 3, cada uno hace lo que puede y pone su mejor ritmo. No es mi mejor día aquí, aunque he subido a ritmo, si bien no a tope, lo que no me sirvió para mejorar mi tiempo aquí, haciendo algo más de 35 minutos, pero me sirve para que algunos se vayan dejando ir buscando cada uno su mejor ritmo.

David (dukemetb) me dijo luego que nos habían grabado en vídeo al llegar a Canencia y, tras encontrarme en el punto 4.07, aquí lo pongo, soy el primero de este minuto.

Ya van tres, y se nota...

Aquí repongo agua e isotónica y me tiro hacia abajo solo, aunque saliendo de Canencia, algunos de mis compañeros ya me han cazado y me aplico para ir en grupo ese tramo tan pestoso hasta Lozoya (o Rascafría otros días). Es un tramo, para quien no lo conozca, nada llano. Muchos toboganes, repechos cortos incluso, curvoso, con aire... Ya lo he incluido en "Los tramos más pestosos de Madrid", libro de próxima publicación, jejeje. Al llegar a Lozoya, sin haber ido ni mirado altimetría ninguna (¡ya me vale!), nos enfrentamos al último del día:

CIMA MA06 Navafría desde Lozoya

Puerto de Navafría

Esta ruta me sirvió para conocerlo pues, como he comentado antes, la otra vez que la hice lo subí en sentido contrario y me pareció de lo más agradable, con sus sombras y demás. Esta vez, no me pareció tan agradable ni mucho menos. Al llegar se empieza a ver por dónde va la subida y realmente te das cuenta de cuál es la dificultad de las marchas tan duras como esta (o más, que también las hay): cuarto puerto del día, tercero de primera categoría, con 105 kms ya en las piernas, y en mi caso, sin conocer el puerto. Lo único que sabía de él es que era bastante largo y no muy duro pero sí muy constante, o sea, eso y nada es lo mismo. Nada más salir del pueblo, hay un larga recta no muy dura, pero que si en ese momento a mí me dicen que es La Cueña, hasta me lo creo de clavado que iba. Intento coger ritmo, he intentado guardar todo el día para tener aquí y, poco a poco, vuelvo a coger y dejar gente, aunque me cuesta mucho, no ya hacerlo, si no seguir una línea recta y un ritmo definido. Estoy tocado, pero no me voy a hundir ahora, así que me dedico con todas mis fuerzas a la subida.

Echando un par de...¡¡ojones!!

A falta de 3-4 kms, sin yo saberlo, hay apenas unos 500 metros de llano y leve descenso, que me da un "segundo aire", como a los boxeadores, y que me sirven para recuperar y ponerme ya manos a la obra hasta arriba, mucho peor no voy a poder ir. Y efectivamente, enseguida llego arriba, bastante mejor de lo que yo mismo pensaba cuando empecé la ascensión a este espectacular (por los paisajes sobre todo) y boscoso puerto de Navafría, en algo más de hora y 7 minutos. Bebo, repongo, y completo el póker de fotos, jejeje:

Por fin póker, ya los tengo todos

Bajamos hacia Navafría por una carretera bastante bacheada y llevo grabadas en la cabeza las palabras de todos mis amigos: "De Navafría a Collado Hermoso, métete en un grupo o muere, tú eliges". Como de momento tengo bastante aprecio a mi vida, jejeje, me consigo meter en un grupo donde sobre todo 2 ciclistas, uno del CC Bétera y otro del CC Valdemoro a relevos, nos hacen ir a todos con el cuello tieso, las orejas de elfo y el corazón cerca de la garganta y próximo a la boca... El viento es muy molesto y sopla fuerte, pero yo me acuerdo del GP Canal de Castilla y me parece de bastante menor intensidad.

En Collado Hermoso hay un último avituallamiento; aunque queda muy poco ya, yo tengo bastante hambre y paro a por 2 sandwiches, un plátano y hasta un señor que había por allí si me descuido... Salgo con otro grupo de gente hacia Torrecaballeros, pasando por el repecho del repetidor, que me lo habían vendido como muy duro y lo subí muy a gusto y esperando a los otros 2 que me habían aguantado. En el callejeo por Torrecaballeros, los pierdo y me quedo solo, pero eso sí, a falta apenas de 15 kms. Me pongo un ritmo para seguir rodando que no se me haga duro en ningún momento, y casi sin querer, estoy tomando la rotonda de Palazuelos y la CL601, que me conduce directamente a la meta, en el Pabellón Pedro Delgado, donde entro con un tiempo oficial de 8 horas, 3 minutos y 53 segundos.

No desmontéis la meta aún, falta gente...

Entro muy muy contento por haber terminado, aunque me doy cuenta que no he mejorado el tiempo que hice la anterior edición, jejeje, otra vez será. Cuando me van a tirar la foto, empiezan a desmontar la llegada, aunque luego la vuelven a montar, gajes del oficio. Voy a buscar a los Davides, Íñigo y Clara, y compruebo que no estoy tan mal, que si hubiera tenido que hacer otros 20 kms más, habría podido... El cuerpo humano y la mente a veces no se llevan bien y se engañan, jejeje.

Como conclusión pudo decir que me quedé con la impresión que había podido mejorar el tiempo, sobre todo, por la parada en Navacerrada y el atasco con los coches; además, al llegar me encontré con más fuerzas de las que pensaba, porque de hecho tuve que recorrer otros 7 kms más para ir a por el coche al casco urbano de Segovia y no me dolía todo. Pero eso no borra mi sonrisa de oreja a oreja todo el día (salvo quizá el primer tramo de Navafría, jejeje), disfrutando de la marcha y no sufriéndola por no tener fuerzas. Ya volveremos otro año con más kms a intentar mejorar el tiempo.

Ahora hablamos de la organización: voluntarios y gente en los cruces, en las subidas animando, en los avituallamientos...para mi gusto, perfecto, mucha gente en todos los lados para que nunca faltara aliento o la menor duda en los cruces de hacia dónde ir. Avituallamientos y comida, ya es otra cosa: yo iba de la mitad para atrás y en el primer avituallamiento sólido, los sandwiches y la empanada, ni los vimos, sólo fruta y alguna barrita; en el de Collado Hermoso, en cambio, había de todo, seguramente porque paró menos gente. Y compañerismo para recoger cosas, buff..bajando Canencia, vi un montón de botellas de isotónica azul (yo cogí naranja porque ya no había azul) tiradas a los márgenes de la carretera con más de la mitad de líquido aún (o sea, un trago y la tiro): eso habla de la gente que lo hizo, no digo más. Y en cuanto a la comida, ya que estamos en Segovia: ¿no hubiera sido mejor un buen cochinillo que un bocata de chorizo o jamón? Jejeje, no es posible, lo sé. Eso sí, te dejaban repetir y demás, pero ¿bocadillo?... No me pareció muy correcto, la verdad.

Esto no empaña el gran ambiente y la gran satisfacción de atreverse con una etapa de Vuelta a España y sentirte profesional por un día, yo al menos me sentí así. Volveremos, pero aún sigo paladeando esta edición, por lo menos hasta el año que viene.


Agradecimientos a altimetrias.net por tomar prestadas las altimetrías de los puertos

martes, 25 de agosto de 2015

GRAN PREMIO CANAL DE CASTILLA (168 KMS) 18/7/2015

Ya hace casi un mes que hice esta dura marcha que, si no conocéis, os va a resultar bastante dura. La idea de esta marcha parte para aprovechar los caminos de servicio (sirgas) para mulas que van pegados al canal de Castilla, construcción de casi 250 años de antigüedad (si no me equivoco) para ser usada como transporte y también para ser consumida. En esta edición al menos, se usó gran parte del trazado entre Medina de Rioseco y Palencia.

Es un gran fin de semana dedicado al ciclismo clásico, aparte de esta marcha que en una edición tuvo 250 kms (!!), hay una marcha retro al día siguiente. No hay clasificaciones en absoluto, y te entregan un dorsal con sabor bastante añejo y un pasaporte que hay que sellar en los puntos de avituallamiento. Creo que los de delante los sellaron casi sin bajarse de la bicicleta; ése no era nuestro plan en absoluto. Digo nuestro, porque cuando le comenté a mi amigo Dani del blog Hacia carreteras salvajes (feliz poseedor de una Trek Domane, bici "tragabaches" por excelencia) la idea de ir, se animó si finalmente me apuntaba, como fue. Se apuntó, digo, porque en esos 168 kms van incluidos unos 50 km, 33 por sirga y 17 caminos agrícolas de tierra que pusieron a prueba la resistencia de más de uno. El increíble aire del día "D" hizo el resto.

Nosotros llegamos el día antes, comimos, dimos una vuelta e inspeccionamos la última sirga, la Dársena de Medina, idea de "Dani Cancellara". Salimos por la VA913 hasta llegar a la localidad de Castil de Vela muy cómodamente, de charleta como se puede ver en las fotos:


Sufridores al canto, ¡qué grande Dani sacando fotos!
Al dar la vuelta para coger la sirga, daba un aire de cara espectacular, anticipo de lo que sería el día siguiente. Dani me hizo esta foto entrando en la sirga (derrapé y casi acabo en el canal, jejeje, menos mal que eso no se ve en la foto):


¡Oooops!, cuidadín cuidadín




Otra esclusa, al lado de donde cogimos la sirga



Un par de fotos del fotogénico canal

Las bicicletas, nuestras compañeras: exactamente igual que las llevamos a diario
Hay que decir que las sirgas, al contrario que algunos caminos, son perfectamente ciclables y aptas para ir muy rápido. Al volver y darnos una pequeña ducha, fuimos a recoger el pasaporte, los dorsales y el saco. Nos dieron un gel para la badana que aconsejaron por las vibraciones y, que al menos yo, me eché en gran cantidad y de algo serviría, pues dolor en esa zona noble no tuve, jejeje. Nos dieron una charla antes de empezar diciendo que, por favor, dentro de las sirgas ¡no se vaya, como el año pasado, a más de 40 km/h! Dani y yo nos miramos un tanto incrédulos, aunque hay que decir que, en esta primera toma de contacto, entre los chopos (que quitan el aire) y al lado del canal, se veía que se podía correr bastante.

Al día siguiente, tras desayunar y preparar la badana, nos preparamos para esto:




y a este perfil, marcando claramente caminos agrícolas y sirgas:

Perfil GP Canal de Castilla 2015




Dani, empapado de retro con su mítico maillot; yo, con la ropa de mi club
Esperando la salida, éramos unos 400 valientes
Hasta la localidad de Valoria del Alcor, supuestamente, vamos en un tramo neutralizado que controla la Guardia Civil; pero con aire a favor, es difícil controlar a un pelotón de tragamillas, jejeje. Bueno, decir antes de seguir, que la bicicleta que no vimos allí, o no la han fabricado aún o no existe: bicis de ciclocross, de carbono con perfil alto, alguna MTB, de acero con palancas en tubo diagonal o al final de la curva del manillar...increíble la exposición rodante, jejeje. Coincidimos incluso con un ciclista algo más alto que nosotros (que no somos pequeños) que iba con un bici lituana clásica, ¡¡para alucinar!!

Llegamos al primer avituallamiento, y al tajo: sellar pasaporte, y enseguida empiezan los tramos de caminos que hasta ahora no hemos tenido. El pasaporte es un librito que lleva la ruta y los tramos para que selles. Hay que decir y repetir que es obligatorio sellar todos los puntos para que te sellen el de la llegada, aunque siendo una marcha no competitiva, se supone que no debió haber supuesto mucho retraso para los que corrían a tope. Una imagen (o más) valen más que mil palabras:






El pasaporte entero, en toda su plenitud y belleza

CB1 “Las Bodegas”  Longitud 0,8 Km. Dificultad *

Recibiremos nuestro "bautizo de tierra" una vez atravesado el páramo de Torozos y superados una serie de repechos en las inmediaciones de Cigales, en el km 47.
Estamos justo después del primer avituallamiento del día, donde afrontaremos una sección sin complicación, salvo por el hecho de que el piso está bastante suelto, con mucha gravilla. Ello nos servirá para hacernos una idea de lo que nos espera en el resto de la prueba mientras circulamos junto a las típicas bodegas excavadas en las cuestas del páramo, tan comunes por estas latitudes donde el vino ha sido objeto de culto desde los tiempos de los romanos.

Esto es lo que pone en la web del evento de este paso, para mi gusto, bastante pestoso. Mucha gravilla suelta y, nada más entrar desde una calle del pueblo, hay que tener mucho cuidado para que la bici no derrape y caigamos. Después, eso sí, te acostumbras al traqueteo, y se te hace hasta corto. He encontrado una imagen en la web del evento (yo bastante tenía con mantener el equilibrio, jejeje):



Después, volvemos a una carretera (qué pestosas casi todas las de esta zona al ser comarcales, algunas estaban peor que las sirgas, jejeje) y enseguida enlazamos con una primera sirga, bastante larga y muy divertida, en la que vamos al lado del canal y la vía del tren. Esto es lo que pone en la web del evento:

S1 “Corcos” Longitud 5,7 Km. Dificultad ***
Tendremos nuestro primer contacto con el Canal en el Km 54, en este tramo que discurre  entre la estación de tren de Corcos - Agularejo y  las cercanías de la localidad de Valoria la Buena. 
Se trata de una sirga con una entrada complicada, con un paso estrecho por encima de un puente histórico del Canal de Castilla. Después hay un pequeño descenso y una curva a izquierdas para rodear la esclusa y la antigua fábrica de harinas en la que habrá que tomar mucha precaución. De todas formas no os preocupéis mucho porque se os recordará y estará perfectamente avisado in situ.

El resto del tramo es muy rectilíneo al circular paralelo a las vías del ferrocarril. Por ello la dificultad técnica no es elevada pues tampoco cuenta con mucha piedra suelta, si bien su apreciable longitud comenzará a hacer mella en las piernas. 
Bueno, no recuerdo que la entrada fuera tan complicada, porque realmente voluntarios había por todas partes; pero lo que sí recuerdo es que aquí empezamos a cogerle el truco a esto de las sirgas, rodando si no con mucha velocidad, sí con cierto ritmo constante a 20-24 km/h. Eso sí, las bicicletas preparadas (ciclocross, antiguas, étc) nos adelantaban a una velocidad espeluznante.

A partir de aquí, y salvo 2 tramos de apenas 300 y 100 m respectivamente de camino agrícola (o carretera blanca como también lo indican en el pasaporte), tenemos casi 24 km de una carretera plena de toboganes y baches que nos recuerdan constantemente que esto no es un paseo y cómo eran las marchas y carreras antiguas hasta llegar a Dueñas, donde un avituallamiento completo...y nuevo sellado.


Tarta de manzana, maravillosa. De lo mejor de la marcha

Decir de los avituallamientos que había de todo: yo encontré y comí alguna barrita enérgetica, pero de lo que más había eran sandwiches, tarta de manzana o empanada (en el último), agua, Coca Cola y Aquarius suficiente. Lo digo tranquilo porque yo iba bastante detrás y había eso cuando llegaba.

Tuvimos bastante suerte con el tiempo: a pesar de la fecha, no hizo demasiado calor, con lo que tampoco tuvimos que estar especialmente atentos a las deshidrataciones.

Tras ésto, empezaba una de las "bromas" de esta marcha: la sirga de Soto de Albúrez, de 14'5 km entre las afueras de Dueñas y Palencia, que nos recibía en su dársena. Se pueden decir muchas cosas de este tramo, casi todas buenas. Esto pone la web del evento:

S2 “Soto de Albúrez” Longitud 14,5 Km. Dificultad ****
Estamos en el Km 86. Sirga muy larga y con una apreciable dificultad técnica tanto por el curveo inicial tras el precioso paso por Dueñas,  como por los cambios de sirga en el Soto de Albúrez y Villamuriel de Cerrato. Además, salvo en las cercanías de las poblaciones, presenta bastantes curvas, aunque el piso en general es razonablemente bueno.
No hay mucho que decir, aquí se puede correr mucho, íbamos ya como locos más rápido que en la anterior (llegando a ir casi a 30 por aquí, que ya es decir). Lo único que no me convenció mucho es, para todas las veces que nos dicen que llevemos la de carretera, lo difícil que es pasar la triple esclusa del Soto de Albúrez, bastante empinada y un banco de arena: en cuanto patina la rueda (y nos pasó a muchos), pie a tierra. Eso sí, el resto de la sirga es una pasada tanto por el paisaje como por la sensación de velocidad y de orgullo por hacer algo diferente, heroico casi:

Por la sirga, "a todo cuello", cerca de Palencia

En la dársena de Palencia (km 102), avituallamiento líquido y sellado...como siempre. Lo que no sospechábamos es que empezaba un auténtico infierno llamado viento de cara que cuando sopla por estas latitudes es casi peor que querer subir el Himalaya. Nos quedaba lo más duro, y a fe que lo fue aún más por el aire. Primero, había un repecho para subir a Autilla, donde a duras penas pasaba de 12-15 km/h cuando seguramente se podría subir casi a plato. Una vez subido, nos encontramos una recta (tal cual, recta sin una sola curva) con todo el vendaval desperdigando grupos de ciclistas por el llano para intentar hacer algún relevo y refugiarse como buenamente pudieran.

En el km 120, a la altura del Monasterio de la Virgen de la Alconada, tomamos un camino que sale a la izquierda para subir Los Molinos, un repecho en tierra que nos lleva a través de un parque eólico (!). Información de la web:

CB4 “Los Molinos”  Longitud 4,3 Km. Dificultad ***

Tendremos que haber recorrido ya 120 km para afrontar de nuevo una "blanca" del día.  Se trata de un tramo que arranca junto al Monasterio de la Virgen de la Alconada, en las cercanías de Ampudia. El comienzo es común al tramo de la Alconada empleado en 2014, pero totalmente distinto, pues en vez de circular por caminos agrícolas llanos, enfilaremos una pronunciado repecho (Cota nº 2 Los Molinos). La escalada tiene una elevada dificultad técnica,  la cual continúa una vez hemos coronado, ya que en la parte alta del páramo nos encontraremos con dos cambios de camino con curva de 90º en las que habrá que estar atentos. 
Además la vuelta a carretera, antes de acometer una corta bajada hacia Ampudia que también requiere de la máxima atención

Aquí el problema es que donde más pendiente hay, nos encontramos prácticamente en un banco de arena como el de la triple esclusa anterior que comentaba. En cuanto patinas, al suelo. Patiné, y para arriba lo que me quedaba. Arriba ya, eso sí, aire para regalar, que para eso estaban allí los molinos:

Páramo tras la subida a Los Molinos

Había por arriba del páramo un llaneo por caminos que resolvimos sin problemas y en cuanto llegamos a la carretera, para abajo dirección Ampudia, a por el último y necesario avituallamiento completo.

Necesario digo, porque tras un tramo de tierra de unos 800 metros sin mayor dificultad técnica y siguiendo con el aire de cara, ahora nos quedan prácticamente 26 km de caminos y sirgas, los últimos de la marcha además, lo que los hace más duros todavía.

Desde Ampudia nos acercamos a Villerías de Campos por la CL612 cuando ¡oh, sorpresa! Dani sufre un reventón en su rueda delantera. Sorpresa porque yo vi muy pocos pinchazos, la verdad. Tras mirar detenidamente, nos dimos cuenta que se había rajado un poco la cubierta. Aprovecho y comento el material que llevábamos: él llevaba cubiertas Continental GP4000 2 de 25, absolutamente confiables y muy reconocidas; yo, por mi parte, llevaba una cubierta Vittoria Rubino Pro Tech de 25 detrás y una Kenda Kaliente de 23 delante, que me resultaron muy bien. Estábamos solos y no llevábamos una cubierta de repuesto, así que se le ocurrió poner un plástico por dentro y usar una bombona de aire para intentar que aguantara lo más firme posible.

En ese momento, tras tantos kms de aire de cara, la cubierta, sufrió un pequeño momento de debilidad, pues esa misma carretera llevaba dirección Medina y no hubiera pasado nada, hubiera acortado la marcha por avería. Apretó los dientes y, en el desvío que llevaba al siguiente camino, me acompañó "porque si seguía por la carretera con ese vendaval, no aguantaría mucho"...por eso o por narices que se dice, ¡bravo! Yo también tuve mi momento de flaqueza, más adelante.



CB6 “Campos”  Longitud 3,0 Km. Dificultad ***

Poco después de sobrepasar Villerías, en el Km 137, encaramos el tramo más "agrícola" de la jornada, rodeados de campos de cereal hasta el cruce con Meneses de Campos.

Estamos ante una secciónde dificultad técnica moderada, consecuencia de un piso irregular en algún momento. Además circula a lo largo de pequeñas lomas, con lo que no es completamente llano, lo cual hará más ameno su rectilíneo trazado. 
No hay mucho que añadir, este tramo se nos hizo muy ameno, además mi compañero fue cogiendo confianza al ver que la reparación funcionaba y me dio algún relevo. El aire nos daba aquí de costado frontal, pero ya no totalmente frontal como desde Palencia. En algún momento, era un cierto alivio, aunque no lo parezca.

 CB7 “Meneses de Campos”  Longitud 7,5 Km. Dificultad ****

Espectacular tramo especial, el penúltimo del recorrido, pillándonos ya tocados pues hemos recorrido 142 Km. y viene prácticamente seguido con el de Campos. Además una vez que lo encaremos, ya no volveremos a tocar el asfalto.

Cuenta con dos partes muy diferenciadas, una primerade unos 3 Kmen los que el cicloturista deberá, al más puro estilo París – Roubaix, rodar por los laterales de la pista, evitando el centro de la misma en la que el firme está lleno de “cantillos” que forman una superficie rugosa similar al pavé. Concretamente estamos en el camino viejo que va de  Meneses a Castil de Vela, que fue empedrado hace unos 50 años al realizarse la concentración parcelaria.
La segunda parte de la carretera blanca, de menor dificultad técnica pero más ondulada, muy divertida que conecta directamente con la última de las sirgas tras pasar por encima de un puente sobre el Canal de Castilla. Habrá que tener cuidado en esa conexión, pues se realiza con una curva muy cerrada a izquierdas, una vez superado un puente sobre el Canal a la altura de la esclusa nº 4.
La primera parte se hace muy pesada, esto parece pavés, hay que ir por el borde como indica claramente y tampoco es mucho alivio para el cuerpo, la verdad. Las vibraciones a estas alturas ya machacan más que pedalear y hacen muy complicado seguir teniendo ganas y ánimo. Menos mal que es corta, pero eso sí, muy sufrida.

La otra parte, aparte de ondulada, se hace por caminos en bastante buen estado y que además dejan vislumbrar la sirga, que con sus chopos, algo de viento nos quitará cuando lleguemos. Entre tanta subida y bajada por esta parte, nos separamos y juntamos varias veces, las fuerzas y son muy pocas y hay que seguir estrictamente el ritmo de cada cuerpo.

 S3 “Dársena de Medina” Long. 13,5 Km. Dificultad ****

Como guinda a nuestro periplo “canalero” nos enfrentamos al tramo especial que quizás presenta más dureza de todos. Supondrá todo un reto afrontar los más de 13,5 Km. de esta sirga con 149 Km en las piernas. Especialmente duros se nos harán los primeros Km, donde la superficie de rodadura no es muy "firme" y nos obligará a ir con mil ojos. 

Pero la belleza de la sirga  y los “sotos” de chopos la harán más llevadera y nos aliviarán antes de realizar nuestra entrada triunfal en la Dársena de Medina de Rioseco, logro que nos dejará plenamente satisfechos tras haber superado un día lleno de obstáculos. 

Este fue el tramo que habíamos hecho el día anterior (bueno, no entero) y sabíamos que se iba bastante bien por aquí, en ligera cuesta abajo y resguardado por los chopos del aire. Había que tener mucho cuidado al entrar y salir de la sirga en los cruces con la carretera, donde había mucha gravilla suelta. En el mismo punto donde la tarde anterior casi me caigo, un compañero se cayó justo delante de nosotros, aunque sin consecuencias. Eso sí, como efecto de la fatiga, le costó recuperar la consciencia.

Ya aquí,  falta de menos de 10 km, empezó mi momento malo: no podía más, me dolía todo, lo que sabía que tenía y lo que no, estaba harto de vibraciones, de caminos, de canales, de chopos, de pedalear, de bicicleta... Dani se dio cuenta y sólo me pidió que no dejara de pedalear, estábamos demasiado cerca...porque además, si dejaba de pedalear y me paraba, ¿qué? me decía. Tenía razón, en algún momento había que terminar, mejor pronto que tarde. Seguí rodando a su lado, llegamos a la dársena, y cerramos el pasaporte 9 horas y 4 minutos después de nuestra salida.

Orgulloso con el pasaporte, ¡cuesta lo suyo cerrarlo, no lo regalan!

Como conclusión, puedo decir que es de las marchas más duras que he hecho en mi vida, porque además de los caminos (que desgastan mucho porque vas a tope, aquí nadie viene a pasearse aunque no haya clasificaciones) el recorrido está plagado de repechos de menos de 1 km con sus calentones. Aparte, la distancia salía más alta a casi todo el mundo: nos dijeron 163 km y a casi todos nos salieron 168, casi nada. Es un buena manera de conocer dónde está tu índice de sufrimiento, porque hay momentos en los que ya sólo vas por pura inercia. Supongo que volveré a hacerla, pero no sé si el año que viene: igual me sigue doliendo algo, jejeje.

La comida final, por cierto, excelente: ensalada de pasta, pincho de tortilla, fruta y tarta de fresa, ¡delicioso todo! Supo incluso mejor por todo lo que costó llegar, mucho. Si no tenéis claro si queréis sufrir de verdad o conocerla, no vayáis: aquí hay que venir entrenado y sabiendo a lo que se viene, esto es casi para héroes.

Agradecer a todos los voluntarios sus atenciones e indicaciones casi constantes y a la web del evento por alguna foto. Más info: GP Canal de Castilla

lunes, 27 de abril de 2015

Clásica de primavera por la zona sur (120 km) 24/4/2015

Seguro que muchos de vosotros (sobre todos los que no conocéis la zona) estaréis hartos de escuchar el gran parecido que tienen la orografía de la zona sur de Madrid (las Vegas) y las Ardenas belgas. Aprovechando que éstas últimas se encuentran en boca de todos debido a la celebración de las grandes clásicas profesionales, me permití el hacer una ruta bastante más corta pero del mismo estilo que servirá como mi pequeño homenaje: rompepiernas y con cotas cortas y duras, de las que abundan por aquí, y que al final es una etapa trampa; puesto que no son subidas largas aunque sí duras se pasan a toda pastilla, con lo que al final el dolor de piernas será bastante intenso. Por aquí hay muchas posibles combinaciones, pero esta vez hice esta etapa:




Salgo de Parla sobre las 9.30 de la mañana hacia Pinto por la M408, tras atravesarlo y coger la M841 dirección San Martín de la Vega veo este bonito cartel por el que ha estado peleando (entre otros, claro) la Agrupación Cicloturista de Pinto:


Nada más salir de Pinto, encontramos este cartel; ¡¡bien!!

Debo decir que, en mi opinión, la culpa de algunos accidentes es que los conductores no se suelen esperar a ciclistas en según que carreteras y piensan que éstas son sólo para ellos (!). Por lo cual, me parece bien que en determinadas carreteras pongan estos carteles para recordarles que no es así.

En esta carretera hay algún que otro tobogán ideal para calentar hasta llegar a la rotonda de la Warner, donde se incorpora por la derecha la M506 hacia Arganda del Rey. Desde dicho punto hasta llegar a la vega del Jarama, nos espera una larga bajada por una carretera ancha y en buen estado. En una rotonda que nos marca Ciempozuelos a la derecha, San Martín al centro y Arganda y A3 por la izquierda, continuamos por la izquierda.

Cruzamos el carril bici de La Marañosa (desde Villaverde a San Martín, muy frecuentado los fines de semana) y llegamos una vez pasada la Renfe de San Martín (qué despilfarro, por cierto...) a una rotonda en la que continuamos dirección M506. Vamos en leve subida con el Jarama a nuestra derecha con huertas a diestro y siniestro, un terreno ideal para ir muy deprisa si se tienen fuerzas. Ya picando para arriba hay un puente que cruza el Jarama y llegamos a este muy conocido cartel:


A la izquierda, Arganda, La Radio y Campo Real; hoy vamos de frente

La Cuesta Nueva (o alto de Valgrande) es un paso entre colinas paralelas al cerro Pingarrón (donde se puede subir por una dura pista, por cierto) entre San Martín y Morata de Tajuña por la carretera M302. Hoy nos va a servir de calentamiento: tiene un kilómetro a 3%, un segundo al 7% con alguna rampa casi al 9%, un tercero de nuevo suave al 2,5% y unos últimos 600 metros casi al 7%. Aquí os dejo una altimetría detallada. Me lo tomo con mucha calma y hago un tiempo bastante flojo, ya que además paré a echar algunas fotos. El segundo kilómetro se hace bastante duro, sobre todo si se va demasiado rápido (aquí, casi siempre); el final, también se hace. Además, si el segundo kilómetro te deja tocado, en el tercero y el cuarto se te irá la grupeta, jejeje.


Este es el final visto desde el descansillo intermedio; se adivina el paso



En primavera esta zona ofrece estos preciosos paisajes 

Tras subir, empieza una bajada de casi 3 kilómetros en la que se cruzan, por este orden, los desvíos a Arganda (por la llamada cuesta La Radio) y a Chinchón (bajando por la venta de Frascuelo y subiendo por el alto Los Molinos, muy interesante, por cierto) antes de llegar a Morata de Tajuña. Desde la entrada se ve el desvío a la Vía Verde que nos lleva desde Arganda a Ambite (casi en Guadalajara, unos 45 kilómetros de recorrido). También se adivina por la derecha, al lado de unas antenas, la carretera que sube a Valdelaguna, otra buena ruta para entrenar. Hoy vamos hacia la izquierda, hacia Arganda, por a M313, buscando el llamado pico del Águila. En el mismo pueblo ya hay unas rampas más que interesantes:



Ambas fotos están tomadas desde el mismo punto; se adivina la pendiente que ya hay aquí

Hay 2 posibilidades para subir: por la M313, o por la cantera, desde la calle Calvario (muy apropiado, por cierto). Yo subo por la segunda, con bastante menos tráfico, aunque más dura. Según esta altimetría, hay rampas de hasta un 13% y un kilómetro al 10% de media. No lo conozco y voy con mucha precaución. Se hace bastante duro, y en apenas 2 kilómetros ya hay estas vistas de Morata:


Morata, a nuestros pies en apenas 2 kilómetros

La subida son apenas 3 kilómetros (el último casi llano), y llegamos al cruce con la otra vertiente. La máxima altura está al lado de la central eléctrica (vaya final de alto, por cierto), y me acerco para hacer la foto correspondiente:


Alto del pico del Águila...aunque no lo parezca

Bajo hacia Morata por la M313 con mucho cuidado: el día está muy cambiante y hay muchas curvas, no quiero arruinar el día por una tontería. Busco el desvío hacia la Vía Verde del Tajuña (muy bien señalizada) para dirigirme hacia Perales del Tajuña, a unos 6 kilómetros. El estado de esta vía es bastante bueno tanto para caminar como para la bici. Hay incluso áreas de descanso, y al encontrarme con una de ellas, decido hacer una breve pausa para comer un plátano y unos frutos secos.


La borrica, asilvestrada


Buen estado en general del área de descanso

Arranco y ya voy pensando en el "coco" del día: la subida a Valdeperales (una urbanización ubicada en una colina frente a Perales), que tiene 3 vertientes tan duras como cortas (y son realmente duras): las entradas 2 y 4 desde la carretera de Valdelaguna y la 1, desde la Vía Verde, que es la que vamos a hacer nosotros. Hay rampas al 13%, 15%, 17%...y 125 metros de desnivel en apenas 1,6 kilómetros. Llego a Perales y repongo agua y sigo la vía hasta el desvío a Valdeperales, donde ya me encuentro con esto:


Esto se pone serio, ¿seguro que quieres subir?

Sigo hacia arriba y a la altura de una caseta de información, la pendiente se dispara; aquí lo principal es mantener el equilibrio, si me caigo no voy a poder volver a arrancar. Hago bastantes eses (jejeje) hasta que supero toda la colección de rampas, y esta es la panorámica de lo ya superado:


Por aquí he subido, no sé ni cómo...

Falta aún otra corta rampa de hasta un 13% (buff, vaya calentón) y enseguida vemos el desvío hacia la carretera de Valdelaguna. Antes de bajar, veo Perales a apenas 2 kilómetros, muchos metros más abajo:


Perales, tan lejos pero tan cerca

Bajamos por la vertiente 2, con rampas de hasta un 18%...tiene que ser durísimo subir por aquí, así sin calentamiento. Llego a la carretera M317 y vamos dirección Valdelaguna. Está situado en una ancha colina o mesa, con Colmenar de Oreja y Chinchón, por lo que todas las carreteras a estos 3 pueblos acaban en buenas subidas. Desde Perales la carretera ya va picando, por lo que voy suave, sin cebarme: aún no llevo la mitad de la ruta aunque parte de lo más duro ya está hecho.

Hay una circunvalación antes de llegar al pueblo que quita parte de dureza y encanto a la travesía del pueblo, pero es que además: ¿a algún ciclista le gustan más las circunvalaciones? Están hechas para los coches, ellos van muy rápido, lo que las hace peligrosas para nosotros. Yo giro a la izquierda hacia el centro urbano. Este nuevo alto son apenas 2,5 km a un 5% de media y rampas máximas al 9% que, sin parecer gran cosa, ya os digo yo que se hace duro de pelar:



Fotos de la travesía de Valdelaguna, desde la misma posición

A medio camino, en el pueblo, veo una fuente y hago otra paradita. Caen una barrita y unos frutos secos, y aún me dejo de más para luego. Me pongo en marcha terminando la travesía y voy, por un terreno de toboganes, hasta Colmenar de Oreja. Muy interesante pueblo que visitaré otro día.

En esta ocasión bajo dirección Aranjuez a por otra sorpresa: en estas clásicas hay muros cortos y duros, colinas, quizá lluvia y aire...y pavé o adoquín. Aquí ésto último se puede simular en la pésima carretera entre Colmenar y Villaconejos (M324), estrecha, con asfalto muy muy rugoso y botoso, con parches y baches, sin arcén, estrecha y con parte de firme roto. Seguramente los poseedores (y poseedoras, jejeje) de bicicletas tipo Trek Domane con algo de amortiguación disfrutarán a tope por aquí; yo también lo hice mientras pensaba que en estos tramos los profesionales van a más de 45 km/h...una pasada.

Llegamos a Villaconejos y después a Titulcia tras una larga bajada para reponer; todavía faltan 40 kms y otro muro nos acecha. Os aconsejo a los que no sois de esta zona que bajéis un sábado o domingo a los bares de este pueblo, son un auténtico hervidero de ciclistas tomando algo; entre ellos, cuando está por aquí, nuestro campeonísimo Alberto Contador.

Como no es el caso de parar, circunvalo el pueblo por el puente nuevo sobre el Jarama y me dirijo a Ciempozuelos, cogiendo allí la M305 dirección Aranjuez buscando la cuesta de Los Burros, o Camino Alto. Es un camino asfaltado que sale a mano derecha apenas 3 kilómetros después de la rotonda, buscando subir a Ciempozuelos por las empinadas colinas que salen a nuestra derecha. Tras un puente sobre el tren, la cosa se pone seria, apenas 1,6 km con pendientes que llegan al 11-13% (aunque yo he oído que tiene pendientes más duras). Cuesta bastante subir, es muy constante cuando se llega a la parte dura, aparte que el entorno es muy seco y no hay ni una sombra, lo cual puede llegar a agobiar.


No parece tan difícil, ¿no?

En plena subida, me sucede la pequeña anécdota del día: el conductor de un coche que baja y me ve subiendo, se detiene y me anima con una vehemencia que me hace sacar fuerzas de donde ya quedan muy pocas. Parece mentira que haya gente que piense que el ciclismo esté muerto o que no emocione a la gente a la vista de ésto.

Tras un pequeño gran calentón para llegar pero animado eso sí, hago la última parada al lado del polideportivo de Ciempozuelos. Ahora sólo queda un terreno de toboganes con tendencia a la subida, pero ya quedan apenas 30 kms. Rodeo el pueblo, me incorporo a la M404 dirección Navalcarnero y la A4 y tras pasar por el polígono Rompecubas y la "bola" de radar de Valdemoro, llego a los Torrejones (de Velasco y de la Calzada), ya en bajada. Tras pasar este último, en breve llega el desvío por la M419 que nos llevaría a Fuenlabrada por el polígono La Cantueña, y en 3 km cruza la M410 que nos lleva a Parla, final de nuestra ruta de hoy tras 5 horas y media de bici.

Ya intentaré otro día mejorar mis tiempos, aunque hoy quería compartirlo con vosotros. Espero que os haya gustado.

Sólo tengo que decir que la zona da mucho de sí, esto ha sido un paseo por algunas de las pendientes más duras de la zona, pero faltan bastantes (Las Liebres y Seseña Nuevo-Vallegrande en Toledo, Castillo de Chinchón, Valdelaguna desde Belmonte, Balcón del Tajo desde el río, étc) que habrían hecho la ruta muy larga. Si se quiere diseñar una ruta por la zona que pase de 150 kms, los resultados pueden ser devastadores, y eso que no hay puertos, sólo terreno rompepiernas.


(Agradecer las altimetrías prestadas de la estupenda web 39x28altimetrias.com)